Gregorio Iriarte oblato de María Inmaculada nos da pautas para conjugar los elementos en provecho de la educación. la TV no debe estar separada de la tarea de educar. el educando tiene que aprender a usar la TV con sentido crítico

Gregorio recibe homenaje del diario OPINION

La Tv es el medio de comunicación más utilizado tanto por los adultos, como por los niños y jóvenes. Hay que utilizarla, aprender a vivir con ella, a sacarle el máximo rendimiento y a no dejarse manipular, embelesarse y copiar sus recetas y sus discutibles pautas de conducta.

Tenemos que formarnos en unos criterios de consumo televisivo que van más allá del entretenimiento o de la mera curiosidad. Se trata de llegar una utilización racional e inteligente que pueda aportar grandes beneficios al proceso educativo.

Dicen los analistas que nuestro tradicional sistema de expresión verbal se rige por un procesamiento lineal, lógico y racional, mientras que la expresión audiovisual se procesa en forma intuitiva, emocional y sintética. En consecuencia, la Tv es el medio de comunicación que más poder de influencia llega a tener al incidir en forma directa e instantánea en la emotividad del televidente.

El sistema educativo debería asumir la responsabilidad para lograr la integración curricular de este medio. Los hábitos perceptivos de los niños/as y de nuestra juventud, en general así como y los procesos mentales van cambiando en forma acelerada. En consecuencia la educación deberá adecuar sus mensajes a la sensibilidad y capacidad de comprensión de sus alumnos. Actualmente no puede pensarse en una educación integral y responsable sin una educación en el uso crítico y responsable de los medios.

Quiere decir que darse la inserción curricular de la televisión como auxiliar didáctico y como importante recurso educativo y como fuente de conocimientos. Debe ser base para la planificación curricular.

Integrar la televisión en el aula supone educar con la Tv y educar en la Tv es decir, en el buen uso de la Tv desarrollando la criticidad frente a los desafíos que implica su uso positivo. Es formar desde todos los puntos: técnico, pedagógico, cultural, ético, etc.

La educación de calidad se caracteriza por el continuo diálogo entre el maestro y el alumno, entre la escuela y la sociedad, entre lo tradicional y lo moderno. La televisión como recurso educativo bien utilizado puede ser uno de los mejores instrumentos de trabajo, ya que se juega con la aceptación y el entusiasmo de los alumnos. Su variedad permite un aumento de los aprendizajes, tanto de tipo conceptual, como actitudinal.

También es un excelente medio para el desarrollo del área psicológica y afectiva. Algo muy importante es la formación del profesorado para la integración sistemática de las nuevas tecnologías y de los medios de comunicación como recursos didácticos.