Cristian Massud L.
Sus 1,89 m pueden intimidar, pero su forma de ser allana el terreno para conversar con él.
John Arandia es periodista desde hace 15 años y se ha destacado por su programa de análisis Todo a pulmón, que conduce desde 2011 en Cadena A (canal 36), red de la que también es director nacional de noticias.
Está separado de su mujer desde hace tres años y tiene dos hijos: Adrián (13) y Sebastián (8).
Hizo una pausa en su trabajo para contestar las preguntas que le enviaron de todo el país.
-¿Le apasiona más ser piloto que comunicador social? Si no fuera periodista, ¿qué sería? (Fabiola Vargas, Santa Cruz)
-Mi pasión son los aviones y creo que pronto me daré el gusto de dedicarme a ello por un tiempo. Son dos formas de estar en el aire (risas). Si no fuera periodista, estaría en los aeropuertos del mundo. Eso es seguro. Ver el mundo desde arriba te inspira en esta creación divina, de la que eres parte. Gracias ‘Fabi’.
-¿Cuántos años tiene? ¿Dónde nació? ¿Cómo recuerda su niñez? (Sofía Velasco, Beni)
-Sofía, amo a tu tierra y a su gente... ¡Qué bella Trinidad! Tengo 39 años y el 24 de junio cumplo 40. Nací en La Paz, en la pujante ciudad de El Alto. Mi madre es paceña y mi padre, potosino. Y mi corazón es del oriente boliviano, especialmente la Amazonia.
En cuanto a mi niñez, fui feliz, muy feliz... disfruté de la naturaleza, la tierra, los amigos... Recuerdo los fines de semana en el mercado con mi madre, los paseos de la mano de mi abuelo, el fascinante mundo que mi tío me mostraba con lo joven que era él y los juegos en las aceras de las calles.
-¿Es romántico? ¿Qué música le gusta? (Fátima Forteza, La Paz)
-Crecí con música, me gusta de todo, pero también depende del estado de ánimo. Pero, por favor, no me pongas cumbia si no quieres matarme.
Respecto a ser romántico... sí, he sido un loco en muchas cosas por amor. ¡Qué hermoso es enamorar y ser correspondido! Un mundo de detalles, el precio, y si es grande o chico es lo de menos. Es llegar a lugares solos, disfrutar de la naturaleza, una película, abrazarnos, caminar sin rumbo, arrancar una flor y dársela, y simplemente mirarla y quedarte callado...
Amor es definitivamente llevar lo físico a la química, haciéndonos locos de felicidad. Tú dirás, ¿parezco romántico?
-¿Es bueno para el baile? ¿Qué perfume usa? (Gabriela Díaz, Santa Cruz)
-‘Gaby’, mirá, lo que me preguntás me hace poner rojo. Mi médico me ha dicho que soy arrítmico. Tengo dos pies izquierdos. Así que prefiero decir que en los bailes ando luxado o algo así (risas). Mis perfumes favoritos son One, de Calvin Klein, y Bravío, de Christian Meier.
-¿Cuánto mide? Durante su juventud, ¿aprovechó su estatura para enamorar? (Magalí Tórrez, Cochabamba)
- Es un lío encontrar mujer de mi tamaño. Mido 1,89 m. “Tan alto”, dicen las mujeres y huyen. Creo que para mí es una gringa nomás. Nunca me aproveché de eso, ni sé cómo lo haría. Quizá un servicio para cambiar el foco de la casa.
Lo grande y lo pequeño se mide por lo que se logra. Hay mujeres inalcanzables por lo que son y lo que logran... mujeres tan altas de espíritu y lucha por la vida. ¡Yo quiero una así de alta!
-Siempre se lo ve serio y de buen carácter, ¿alguna vez ¿ha llorado? ¿Por qué? (Rodrigo Saucedo, Beni)
- Si supieras Rodrigo, muchas veces caí de rodillas i-nundando mi alma de dolor y de agonía. Soy como me ves en la TV, más muy poca gente conoce mi interior.
La sensibilidad que me pusieron mis padres la trato de cambiar hasta hoy para ser mas fuerte. Pero no me arrepiento de haber llorado, era mi alma expiando el dolor.
Al igual que cualquier ser humano, caí derrotado, me inundé de tristeza, sufrí de desamor y perdí gente que quise y lloré muchísimo tantas veces...
Por fin estoy aprendiendo la lección, esos momentos te preparan para lo que viene, te hacen más fuerte. ¿Por qué? Una vez lloré por un gran amor.. fue a alguien que le di mi vida, pero se encargó de destruirla.
-¿A qué periodista admira? ¿Por qué? (‘Coco’ Arimendano, Santa Cruz)
-‘Coco’, saludos. Un abrazo a la tierra cruceña. Tengo admiración por todos. Me gusta ver a todos, oírlos, aprender mucho. Todos son en su estilo una carga informativa en mayor o menor potencia. Esa apertura me pone muchas veces a pensar en lo que debo hacer.
-¿A qué le teme en la vida? (Juan Carlos González, La Paz)
- Hola, Juan, tocayo. Si te lo dijera, mis detractores tendrían muy buena información para atacarme.
Solo te diré -con las disculpas del caso- que son esas cosas las que pretenden doblarte la fuerza del espíritu. Les agradezco el cariño profundamente.
Gracias por aguantarme en la pantalla y sobre todo por ser el sostén de mi trabajo.
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